Durante muchos años existían dudas sobre qué era lo que exactamente sucedía en el cerebro de las personas cuando practicaban la meditación u otros ejercicios de conciencia plena, pero gracias a los avances en la tecnología, cada vez es más fácil mostrar de manera visual y clara los efectos de estas prácticas.
Es por esto que cada día más personas agregan la meditación como algo indispensable en su rutina diaria, teniendo claro los beneficios que buscan.
Lóbulo frontal
Ésta es la parte más evolucionada del cerebro, responsable del razonamiento, la planificación, las emociones y la autoconciencia. Durante la meditación, la corteza frontal tiende a desconectarse.
Lobulo parietal
Esta parte del cerebro procesa información sensorial sobre el mundo circundante, orientándote en el tiempo y el espacio. Durante la meditación, la actividad en el lóbulo parietal se alenta.
Tálamo
El guardián de los sentidos, este órgano enfoca su atención canalizando algunos datos sensoriales más profundamente en el cerebro y deteniendo otras señales en sus pistas. La meditación reduce el flujo de información entrante y la deja pasar casi “por goteo”.
Formación reticular
Como centinela del cerebro, esta estructura recibe estímulos entrantes y pone al cerebro en alerta, listo para responder. Meditar manda una señal para relajar los estados de alerta.